Los signos del elemento fuego expresan un principio vital cálido, radiante y activo que se manifiesta con entusiasmo, estímulo, confianza y un fuerte impulso dirigido hacia la expresión del yo. Expresan una energía universal radiante, exaltada y entusiasta.
Cuando la Luna se sitúa en signos de fuego el individuo reacciona ante las experiencias cambiantes con acción directa y energía de autoafirmación.
Aries: este signo es el iniciador por naturaleza y por lo tanto estará siempre dirigiendo nuevos proyectos con iniciativa e individualidad. La suya es una impulsividad temeraria, la unión de energías entre la emocional Luna y el guerrero Marte (regente de Aries) hacen al individuo alguien de reacciones inesperadas, fuego pasional y una iniciativa difícil de doblegar.
Leo: en Leo la cualidad emocional de la Luna va dirigida hacia la libertad de expresión y cierta impaciencia. Este signo desea brillar, llamar la atención y ser el centro de todas las miradas por lo que muchas de las emociones del individuo dependerán de si consigue expresarse con total firmeza y vitalidad. La energía lunar se combina con las características del Sol convirtiéndose en extraversión y cierto egocentrismo.
Sagitario: se trata del signo más filosófico de todos y como la luna representa a la necesidad emocional del individuo, una Luna en Sagitario precisará de expansión en todas las áreas de su vida, emocional, laboral y culturalmente. La combinación lunar con el generoso Júpiter hace que el individuo busque la estabilidad emocional y espiritual experimentando y aprendiendo distintas disciplinas, no conformándose con un solo sistema de creencias.
