No hay motivos para ser escépticos: una consulta de Tarot no puede ser más que una excelente oportunidad para mejorar la manera en que vivimos. Por supuesto, no hay anda de mágico en la consulta, sino que simplemente una persona muy bien formada en la interpretación de los signos lee la tirada de cartas respondiendo a nuestras más profundas inquietudes.
El Tarot ayuda a las personas que se encuentran en momentos de crisis o simplemente de incertidumbre, y a aquellas que saben que pueden sentirse mejor pero no encuentran cómo. A veces, estar tan inmersos en nuestra propia vida nos enceguece, y necesitamos de alguien ajeno que nos ayude a aclarar algunas situaciones personales.
Confía en la tirada de tarot
Mucha gente se pregunta cómo es que una persona que no los conoce puede, a través de las cartas, ayudarlos a vivir mejor y a conocerse más. Pues bien, no es el tarotista quien da esa información, sino las mismas cartas que cada consultante escoge.
Otra pregunta frecuentes es por qué confiar en las interpretaciones de un tarotista, sobre todo cuando las imágenes de las cartas parecen ser tan claras, pero las interpretaciones son tan rebuscadas. Lo cierto es que la tirada del Tarot es compleja, y son muchos los factores que guían al especialista en sus lecturas. Por ejemplo, el orden en que son seleccionadas las cartas, la orientación con que se manifiesta y los distintos arcanos en interacción guían la interpretación.